Poesía de los sueños

CIELO O INFIERNO

atrapados bajo una losa de piedra para siempre. ¿Cómo será el vacío? Nuestro yo a la nada...; sin poder soñar, comer, amar, beber una cerveza fresca, y también trabajar, ¡por qué no! No me hago a la idea. Necesito soñar bajo un juego de dioses, como Jesucristo y el Demonio en el desierto, según la Biblia, una de las novelas más leídas; tal vez los defensores de Dios tengan toda la razón y argumentos para creerlos, pero me siento más identificado con el Demonio. Gozar del cuerpo con todas las diabluras sexuales, proporciona al espíritu gran sosiego. ¿Tan malo es? La mayoría de los seres así lo prefieren, sobre todo cuando se es joven. Los viejos también somos felices con los sueños del pasado, y alguna que otra caricia picante, en cierto modo nos pone en forma. Un día soñé que había muerto, había pasado por el túnel famoso, y al final me esperaban cuatro ángeles con cuerpos femeninos; los más bellos que jamás había visto, ni las damas de ojos azules y pelo rubio de mi reciente viaje a San Petersburgo tenían comparación. Cuando rasgaron el mejor de

Antonio Pérez

Mancha Real ¿Cómo será el Cielo y el Infierno? ¿Estarán aquí en la Tierra? ¿Dónde está aquel que todos los días come, viste y colma de felicidad todas sus ilusiones?, ¿y aquel que tiene hambre, vive en la miseria, la desesperación…? Creo que el Cielo y el Infierno son reflejos del bien y del mal en la Tierra, al margen de la fe en la felicidad del más allá que propagan todas las religiones, según los escritos que han legado sus profetas; la lógica de la vida, no ayuda a concebir ilusiones sobrenaturales, aunque los sueños y la fantasía no tienen frenos. Si el ser humano tiene fantasía, tal vez hay algo que la alimente, ¡por qué no!; sin embargo, nadie ha podido demostrarlo.

La fantasía es importante; mantiene ilusión por la vida. Es triste que a causa de la muerte, quedemos

58