Ventanas al Paraíso

Rutas del Poeta-Mágina

gran vegetación de encinas, prados verdes, por donde discurren en primavera pequeñas acequias de agua, todo muy agradable a la vista, para descansar tomando una merienda en frío; no aconsejo encender lumbres, dada la excesiva abundancia de árboles. Me dieron ganas de echar una siesta en los verdes prados, pero aceleré la marcha, puesto que llevaba retraso de hora y media. También desprecié la cerveza que me ofreció un campesino, a pesar de la sed que llevaba. Un gran desencanto sacudió mi espíritu, e hizo me sintiera más cansado, toda vez que cuando llegué al lugar que me recogerían, no había alma esperando, lógico, puesto que llegué con hora y media de retraso; no obstante, mi boca le dio un buen repaso a muchas personas que hoy están muertas. Con vejigas en los pies, tuve que andar 3 kilómetros más por la carretera de Cambil, hasta que al fin me recogieron, y todos juntos pudimos tomar unos refrescantes cubatas en

el Pub de mi amigo Miguel, en Huelma, no sin antes, saborear una buena ración de cordero asado de la tierra.

POEMA En los chopos del Aguadero hay un refugio de pastores, donde hago mi sendero, por Mágina de mis amores. ¡Ay corazón de mi Sierra!, de un lado palpitando, del otro: baldía la tierra, parece agonizando,

como aquel…tan lejos…tan cerca, al carrusel, a la feria, en su necedad terca, convive con la miseria,

vulgar, a toda prisa, le venden el perfume, allí que venden la risa,

79

Made with